La importancia de las convocatorias

El jugador del Diagoras Rhode Yiannis Koskiniatis, que compite en la tercera división griega, se suicidó tras conocer que se había quedado fuera de la convocatoria de su equipo de cara al partido copero que iban a jugar ante el Olympiakos. Koskiniatis, de 25 años, se arrojó al vacío desde una altura de más de 12 metros después de saber que no formaría parte de la lista de convocados de su equipo en la cuarta ronda de Copa, que mediría al modesto Diagoras con el potente Olympiakos.

La policía informó que el centrocampista heleno dejó una nota en la cima del acantilado, en cuyo contenido explicaba que haberle dejado fuera de la convocatoria había sido "una gran injusticia" y que por ello se decidió a poner fin a su vida.


Quería resaltar en negrita lo más impactante, pero es que es imposible seleccionar.


Fuente: la siempre fiable y nada sensacionalista www.marca.com



Marketing a escena. Fanta pone voz a sus latas

Buenas tardes, damas y caballeros.

Hoy regresamos a la sección más impopular de este blog: "Marketing a escena".

Obviando vuestra falta de interés por estos temas, he decidido daros a conocer esta noticia que me ha resultado bastante curiosa.

"A partir del próximo mes de noviembre, Coca Cola distribuirá, en las máquinas de vending de algunas zonas universitarias, unas latas muy especiales. Al abrirlas, en lugar del sonido del gas que se escapa, se podrá oír una grabación de voz que informará al consumidor de que ha resultado premiado con uno de los viajes a Nueva Zelanda sorteados en la última promoción de Fanta. Una acción hasta ahora no vista en España y para cuyo desarrollo Coca Cola ha importado una tecnología procedente de Estados Unidos.


Fanta ha construido una comunidad on line de la que ya participan 40.000 jóvenes y en la que hay que registrarse en grupo. En la actualidad, Fanta es la segunda marca de refrescos más recordada por el consumidor español, en pugna siempre con Aquarius, y por detrás de Coca- Cola. Fanta Zero, la versión sin azúcar de Fanta, que ha vendido más de 16 millones de litros en sus primeros seis meses y supone ya casi el 7% del total de las ventas de la marca."

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Saludos.

Soulcanela, Latura, Rivers & seven more go out for a great weekend

Buenos días, tardes, noches.

Antes de comenzar, me gustaría puntualizar varios detalles.

En primer lugar, quería pedir disculpas por el bajo grado de actualización al que someto a este blog últimamente. Creo que la culpa es de Rivers, que cada día se esfuerza menos por contentarnos en su blog.

Por otra parte, he querido dedicar un breve guiño a aquellos que creen haber encontrado la felicidad por teclear en inglés todo aquello que pasa por su ordenador. Yo también puedo hacerlo, I can do it but I`m not so awesome as you are, cabrones.

Centrándonos al fin en lo que hoy nos contempla, esta semana hemos cerrado definitivamente el fin de semana que nos llevará a El Picazo, pequeña localidad sita en el sur de Cuenca, de apenas 700 habitantes, en donde lo único que podemos lamentar es la ausencia obligada de Paclo a.k.a "el pionero de todo esto", que como bien sabéis los cuatro gatos que leeis esto, se encuentra exiliado en Estados Unidos. Desde aquí un fuerte abrazo, te homenajearemos desde El Picazo.

Aunque hemos visto fotografías interiores de la casa, prefiero ocuparnos de ellas en la crónica que realizaremos a la vuelta. Más que nada por precaución, no vaya a ser el timo de la estampita y me cierren el blog por pardillo.

Para abrir boca, os dejo con con un serial fotográfico del pueblo y alrededores, ya que son las típicas fotos que nadie hace, por si se nos olvida.

Vista aérea de la zona.

Río Júcar.

Río Jucar (fotografía de alguien escondido).

Río Júcar.

Habitantes de El Picazo, de cháchara.

Entrada al pueblo. Clásica Citroen C-15 al fondo.

La iglesia del pueblo.

La iglesia del pueblo (II).

La plaza central. Todo un ejercicio de diseño.

Saludos.

Death Race. No esperábamos menos.

El pasado miércoles 8 de octubre, Madrid nos concedió un respiro a Latura y a mí, y no supimos aprovecharlo de mejor manera que acudiendo al cine para ver "Death Race", un remake de la original del 75 que pasó con más pena que gloria por los cines, no sé si por la película en sí o por el remix interpretativo de David Carradine y Stallone.

El caso es que la película empezó con la teoría que Latura y yo venimos aventurando desde hace ya unos meses: El paro y la escasa recompensa al trabajo bien hecho desembocará en un aumento de la criminalidad, buscando la cárcel para poder comer (no es exactamente así pero lo adapto para decir en un futuro que fui un visionario).

La privatización de las cárceles hacen que sus directores las exploten comercialmente mediante sus productos, que no son ni más ni menos que los presos, en este caso los de Terminal Island.

De ahí que se organice una Death Race para incrementar notablemente los índices de audiencia.

Aunque la película tiene graves agujeros argumentales, la actuación del especialista Jason Statham y, por qué no decirlo, de Ian McShane (si la veis, jamás olvidaréis una escena suya sencillamente grandiosa) ayuda mucho, junto con el color de la película, los coches que se gastan y algunas escenas espectaculares.

Por supuesto, en este cocktail de vehículos rápidos no podían falta curvas, concretamente las de la prisión femenina. ¿Creíble? No, pero no hemos venido a creer.

¡Ah! Me encantó lo de las armas y los escudos.

Nota final: 8/10

Como regalo final, os dejo con el trailer de la muy esperada Transporter 3. Sé que el listón está muy alto, pero con Statham todo es posible.

Saludos.